Centro cívico en Campana

Buenos Aires (ARG)

Campana es una ciudad industrial, de 85.000 habitantes, situada a 75 Km. de Buenos Aires, a orillas del Rio Paraná. Un rio que ha sido el elemento vinculante de la ciudad con Rosario, Buenos Aires y todo el litoral argentino.

Como suele suceder –Buenos Aires es otro ejemplo-, la ciudad redujo el rio a su condición de medio de comunicación, sin otra trascendencia para la vida ciudadana. Vincular la ciudad con el rio es, por tanto, un objetivo aplazado del urbanismo de Campana.

Un trazado reticular se extiende sobre dos avenidas que se cruzan en la Plaza Eduardo Costa. Es peculiar de la planta, la existencia de dos diagonales que, con una inclinación de 45 grados respecto de la retícula–como ocurre en La Plata-, se cruzan asimismo en la plaza central citada. A diferencia de La Plata, en cambio, la retícula no colma un perímetro cuadrado o rectangular, sino que proporciona la disciplina para una cofiguración irregular que se ajusta a los límites naturales de la ciudad.

La ciudad está situada exactamente al sur del cauce del rio en ese punto. La Av. del Ingeniero Agustín Rocca, que parte de la plaza central, culmina con la estación ferroviaria, que da servicio de comunicación, pero cierra la conexión de la ciudad con el rio.

Mi propuesta trata de convertir en centro cívico el ámbito de la conexión ferroviaria. Para ello, dispongo un área rectangular de anchura equivalente a tres manzanas, al nivel de la ciudad (23 m. sobre el rio), que cubra los galpones y las vías del tren. Sobre esa losa se disponen tres edificios de servicios: un centro de convenciones y auditorio, en posición central, y dos edificios compuestos de una base y dos torres cada uno. Capaces de albergar zonas comerciales, culturales, de hostelería y de restauración. Se trata de edificios versátiles, que permitirán ajustar las actividades en función de las expectativas.

Estos edificios están complementados por otros elementos urbanos (áreas verdes, bares, cubiertos multiuso), que diversifican y complementan la oferta de ocio, en situaciones de gran afluencia.

Toda la plataforma se convierte en un mirador sobre el río, a la vez que funciona de centro cívico: centro, aunque en este caso esté emplazado en un extremo. Su centralidad está determinada por su capacidad para atraer a los ciudadanos de Campana por motivos comerciales, culturales y geográficos y constituir una referencia visual de la ciudad y su entronque con el rio.

La claridad de esta propuesta tabula rasa no debería desmerecer el interés y la eventual conveniencia del planteamiento conservador: rehabilitar los edificios ferroviarios y complementarlos con otros de nueva construcción, adaptados a las funciones y actividades no alojables en aquellos.