Distrito de empresas

Volver
2015

Las zonas urbanas donde se concentran los edificios corporativos suelen adquirir un perfil característico, determinado por el hacinamiento de edificios verticales. La identidad visual que adquieren sitúa a un segundo plano la cuestión de orden: la imagen de “down town” -más o menos provinciano- parece que obvia cualquier otra consideración.

En este proyecto he tratado de elaborar un criterio de ordenación básica de las manzanas capaz de acoger los distintos tipos de edificios que constituyen estos distritos. Considerando que el cuarto de manzana es el módulo básico edificable, se plantea una edificabilidad similar en todos los casos: una torre implica destinar a uso público el cuarto de manzana contiguo.

Al situar el proyecto en Barcelona, donde las manzanas están fuertemente caracterizadas por los chaflanes, reproduzco la alineación en el suelo elevado sobre el que emergen los edificios.

Una calle de servicio de diez metros de anchura evita contigüidades en la edificación, facilitando el carácter aislado de los edificios. Esas calles tendrían tolerancia de vehículos a ciertas horas, para facilitar la carga y descarga, pero serían habitualmente usadas por los peatones que transiten en el nivel del suelo.

 

Subir