Paráfrasis del Edificio de Oficinas para Bacardí

Mexico DF

Se trata de una paráfrasis del Edificio de Oficinas para Bacardí, en México (1957-61), de Mies van der Rohe. No hace falta insistir en la capacidad de reverberación del arquetipo miesiano, debido a la universalidad de su estructura espacial.

La crujía es notablemente menor que en el edificio original y el tamaño global es asimismo más reducido, lo quo no merma su solvencia.

El cambio de proporción entre la altura de la planta baja y la primera planta se debe al propósito de usarlo como edificio para exposiciones sobre la ciudad, de modo que la planta piso se destina a investigadores y estudiosos del urbanismo.

Es acaso en el modo de afrontar el control solar donde la diferencia es más acusada: se pretende que la protección no implique merma de la transparencia.

El retraso de la superficie vítrea de cerramiento va acompañado de la instalación de una banda de vidrio de baja emisividad que controla las radiaciones no deseadas. Así, el control ambiental del edificio no solo no disminuye la continuidad espacial, sino que la incrementa, matizando la transición entre interior y exterior con la interposición de una galería perimetral.